El verdadero Holocausto

Existen cientos de monumentos, se recuerda todos los días a través del mundo en radio, televisión, cine, etc. Todos hablan de supuesto holocausto judío. Pero hubo un verdadero holocausto del que nadie habla. Es creencia (ignorante) , generalizada que cuando los aliados llegaron a Alemania, llegaron a "salvar" al pueblo alemán, que llegaron a liberarlo de la dictadura que los mantenía aterrados y, que ellos fueron recibidos con vítores por un pueblo oprimido. Pues esto no es verdad, cuando lo aliados llegaron a Alemania robaron, saquearon, violaron, esclavizaron a millones. Pero de esto no hay películas, de esto no hay obras de teatro financiadas por corporaciones humanitarias, no hay "cazadores de aliados". No existió un juicio de Washington o de Moscú para averiguar sobre los crímenes de guerra aliados y mucho menos de los más atroces crímenes de paz durante la ocupación.
Cuando me muestran fotos de internos muertos de hambre, siempre me pregunto si esas fotos no son de prisioneros alemanes en los campos de desnacificación, o si las pilas de cadáveres no son de los millones de alemanes que fueron "castigados" por las tropas aliadas, o debido a los atroces bombardeos sobre las ciudades alemanas, que eran blancos absolutamente civiles.

Pero nadie llora por el niño alemán esclavizado, por la niña alemana violada hasta morir, por los siete millones de alemanes que fueron raptados y esclavizados en las estepas rusas, condenados a trabajos forzados hasta la muerte. A nadie le importan las atrocidades cometidas en los campos de desnacificación, en los que masacraron a cientos de miles. ¡Claro, ellos no son judíos! Por lo tanto no valen, no cuentan.

A continuación se presenta un artículo publicado en una revista chilena "Estanquero", el 30 de noviembre de 1946, en el que se pueden entrever las atrocidades que sucedieron en Alemania durante la ocupación. Hubo campos de exterminio, pero los que murieron eran alemanes y los asesinos eran los mismos que juraban entonces y juran ahora, que luchan por la libertad.



Heil Hitler !!

Sieg Heil !!

(La foto corresponde a un niño alemán durante la ocupación aliada. ¿Se parece a otras fotos?)


ALEMANIA

LA NECESIDAD TIENE CARA DE HEREJE

Una criminalidad que va haciéndose regla general de vida, he aquí el panorama moral que el hambre y la escasez de trabajo van extendiendo en Alemania. “Hombre con hambre y sin trabajo- hambre de hace meses y falta de trabajo para muchos años- es hombre que primero roba y después mata. NO es pues de temerse ya en Alemania una guerra civil por el hambre; está comenzando una guerra personal, total, de exterminio” así sintetizaba días atrás un corresponsal extranjero la actual situación de Alemania.
Nada tiene de extraño que el Ministro de Negocios Extranjeros de Gran Bretaña, Bevin. Hiciera el 8 de noviembre un serio llamado a su colega norteamericano Byrnes, advirtiéndole de que en Alemania “pueden haber grandes repercusiones políticas como consecuencia de la amenazadora situación alimenticia”. Con tal llamado, Inglaterra persigue que Estados Unidos tome medidas para obtener que sus ayudas alimenticias lleguen a tiempo , pese a las huelgas y demás contratiempos que han ido retardando día tras día la acción norteamericana. El “Manchester Guardian” sintetiza así el cargo británico a la inacción norteamericana: “Los Estados Unidos tienen una gran responsabilidad. Mediante sus absurdas huelgas, sus uniones marítimas han entorpecido el transporte de abastecimientos alimenticios a través del Atlántico. A consecuencia de su deplorable antipatía a la cooperación económica, EE UU. Han provocado la desintegración de la Junta Combinada de Alimentos y han dado una precaria vida a sus sucesores”.
En la zona rusa la situación alimenticia no es menos grave. Y en ésta el rencor de los alemanes se ve aumentado por la actitud rusa que sigue secuestrando familias enteras para sumirlas en el misterio de sus estepas ; y por la persistente negativa soviética de devolver los cuatro millones de prisioneros alemanes que ejecutan trabajos forzados en el interior de Rusia, según datos que proporciona el “Der Abend”, diario alemán de Berlin.
La manifestación más palpable del rencor alemán está en la no detenida ola de sabotaje a la producción y trabajo de los rusos en esa Zona y en el curso de la cual han sido incendiadas cuatro fábricas berlinesas y voladas otras tantas.

HAMBRE Y DESNACIFICACIÓN

Nuevamente se filtran algunas noticias, a través del cable, sobre la miseria en Alemania y las trágicas perspectivas del próximo invierno. En la zona americana “la actual ración básica de 1.550 calorías diarias no puede obtenerse en algunas ciudades...Las carnicerías en Francfort cierran cinco y seis días a la semana debido a que no tienen carne” (UP., 3-XI). En la zona francesa la ración de pan se ha reducido de 300 a 200 gramos (UP., 15-XI). En la zona británica las raciones no alcanzan a 1.200 calorías. La zona rusa dispone de raciones que oscilan de 1.100 a 2.000 calorías. Se presentan ya los primeros síntomas de una huelga de hambre en Ruhr y en otras grandes ciudades. “En Dulsburg la población protestó en masa contra el desmontaje de las usinas y la escasez que pretenden implantar las autoridades británicas, al tratar de hambrear sistemáticamente a la población germana (UP., 15-XI). La mortalidad infantilalcanza en Friburgo a un 33%. El jefe de la clínica de mujeres de Hanover ha dicho que pronto las madres estarán demasiado débiles para resistir los partos. En la mayor parte de las zonas del Este ya no quedan niños con vida menores de dos años (Basilea, junio, 46).
Pero se continúa con la destrucción de las industrias. Rusia ha reanudado sus embarques de reparaciones, tanto en material inanimado como en seres humanos; los americanos han incluido 25.000 toneladas de herramientas mecánicas y otros equipos de su zona en la cuenta de reparaciones y han trasladado también fábricas enteras, como la de aparatos de óptica de Hensoldt, de Herborn (UP., 8 y 15 XI). Los ingleses no pierden tampoco su tiempo, tanto que Robert Boothy ha llegado a decir: “ la destrucción en gran escala de la industria alemana es un acto de locura absurda y es imposible tolerar la defensa de los actos de sabotaje” Agregó que el Gobierno británico era culpable de homicidio por no haber arbitrado medidas adecuadas en Alemania y calificó la incompetencia administrativa en la zona británica como sin precedentes en la historia del país (Londres, UP., 15 XI).
No son éstos, sin embargo, los problemas que parecen preocupar más a las autoridades militarees aliadas. Se encuentran demasiado ocupadas con la “desnacificación” y han promulgado nuevas leyes en virtud de las cuales 7.500.000 alemanes “serán sancionados” (UP., 15 XI). Se establecerán tribunales de distrito y los Estados Unidos enviarán jueces especiales a desempeñar la tarea. Pues, según parece, los tribunales “alemanes” no funcionan a gusto del vencedor. Los principales funcionarios germanos de la llamada “Cámara de desnacificación” se viero obligados a presentar su renuncia después de una “irritada repreimenda” del general Lucius Glay (UP., 5-XI), quien llegó a afirmar: “sean cuales fueren los efectos sobre la economía alemana la desnacificación es un imperativo. Si es necesario, el gobierno militar puede hacerse cargo de ella”.
Entre tanto, se mantiene “el mercado infame de esclavos” con los prisioneros de guerra. (declaración del Cardenal de Colonia, agosto, 46). La cantidad de esclavos es estimada en 7.000.000 por el Episcopado norteamericano (UP., 16-XI).